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Con la intensión de mostrar las nuevas tendencias de moda
Europea pero desde una perspectiva latinoamericana, se organiza la Semana de
Arte Moderno en el Teatro Municipal de Sao Paulo en 1992. Un momento importante para los
diseñadores, porque tenían que abandonar las clásicas perspectivas estéticas,
para promover un estilo diferente que mostrase la estética nacional.
De esta forma fueron partícipes de esta semana de 1992, escritores
modernistas como Oswal de Andrade, Manuel
Bandeira, Guillermo de Almeida y Monteiro Lobato.
La Semana de 1992 significó también una renovación del
lenguaje, incorporándose al repertorio
habitual.
El mayor evento de América latina reúne a los más importantes estilistas en el
lanzamiento de sus colecciones.
También fue dada la partida a la 37ava Moda de
Cuero, evento que reúne expositores de
60 países, además de comerciantes y distribuidores de todo Brasil. El circuito
de la moda en la capital paulista registra un 15% de aumento en el sector
turístico en comparación al año 2016.
La ciudad es uno de los destinos preferidos de los turistas
extranjeros y, el 2016, fue reconocida por la Asociación Internacional de
Congresos y Convenciones (ICCA) como el principal destino de eventos internacionales
de las Américas, al frente de Nueva York, Chicago y Miami, y el 12º en el
ranking mundial. Anualmente, Sao Paulo recibe 11 millones de turistas y ya
superó destinos tradicionales como Londres, Tokio, Madrid, Sydney y Vancouver.
Este año desfilaron Gisele Bundchen, Isabeli Fontana, Jesús
Luz, el novio de Madonna, o Raquel Zimmerman, para quien Karl Lagerfeld creó
especialmente una cartera para ir a la playa. Paulo Borges, director del Sao
Paulo Fashion Week, invitó además a Didier Grumbach, presidente de la Cámara
Sindical de la Alta Costura a participar del evento y a presentar su libro
Historias de moda. Pero según Grumbach “los desfiles de moda no sirven para
nada”… ¡Vaya reflexión en una semana con 40 de ellos!
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